En todo el gobierno del presidente Peña Nieto, las autoridades de Estados Unidos detuvieron y deportaron a 1 129 434 migrantes mexicanos y en lo que va del sexenio del presidente López Obrador han sido 3 035 515 que son 168.7 por ciento más.

Estas cifras se dan a pesar de la pandemia del Covid-19 que frenó las detenciones de migrantes en 2019 (237 078) y 2020 (297 711), aunque son cifras superiores a cualquiera de los años de Peña Nieto.

En 2021 las detenciones llegaron a las 655 594; en 2022 a 803 339; en 2023 a 717 033 y a febrero de 2024 eran 319 760, de acuerdo con datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.

De seguir el comportamiento de los primeros meses del año fiscal 2024 de Estados Unidos, podrían ser más de 1 000 000 las detenciones. Según distintas fuentes todos los años, a pesar de las deportaciones, logran ingresar a Estados Unidos entre 100 000 y 200 000 mexicanos sin papeles.

A lo largo de este sexenio, los migrantes mexicanos a Estados Unidos superan, con mucho, a los migrantes venezolanos, ecuatorianos, hondureños, guatemaltecos, cubanos y salvadoreños.

Según los estudiosos del tema y de las organizaciones que trabajan con migrantes, el incremento de la migración mexicana al vecino del norte se debe a dos causas principales. La primera es la violencia en amplias zonas del país ahora bajo control del crimen organizado. Familias enteras salen de esas regiones y pretenden llegar a Estados Unidos.

Eunice Rendón, Coordinadora de Agenda Migrante, afirma que “en los últimos cinco años, la inseguridad y el riesgo a perder la vida es lo que empuja a las familias mexicanas a intentar cruzar la frontera (…) Migra la familia completa porque ya le mandaron la cabeza de uno de sus integrantes; a mí me tocó conocer uno de esos (casos) en Michoacán”.

La segunda es la situación económica. Al terminar el sexenio el crecimiento de la economía mexicana será de cero o incluso menos. Esto como efecto de la Pandemia de Covid-19, pero también por la manera como se gestionó. El nulo crecimiento del PIB impacta la generación del empleo y también del ingreso.

David Saucedo, especialista en seguridad, afirma que “quienes migran son de ingresos bajos. Son segmentos de la población que enfrentan muchas carencias, que encima de su situación socioeconómica compleja, de falta de oportunidades educativas, laborales, de acceso a la justicia (…) tiene que padecer las presiones de los grupos criminales”.

A las causas del incremento exponencial de la migración que reconocen los estudios del tema se podría añadir el fracaso de los programas sociales del actual gobierno. Según el presidente López Obrador estos iban a evitar la migración e incluso los ha propuesto a los gobiernos de los países de Centroamérica como la solución, para detener la migración. Los discursos van por su lado y la realidad por otra.

@RubenAguilar

Compartir:
Publicidad
Enlaces patrocinados